Bound (Michael Raven, 2008)

Michael Raven contó con la omnipresente Stormy Daniels para protagonizar este drama con más publicidad que fuste llamado "Bound". Con la participación de Randy Spears, Tony DeSergio o Roxy DeVille, entre otros, "Bound" nos cuenta la historia de una prostituta drogadicta que es recogida de las calles por un rico anciano lleno de buenas intenciones. La muerte del anciano y la suspicacia de uno de sus subordinados harán entrar a Stormy en el mundo del bondage y el sado maso y cruzar puertas que costará cerrar.

Pese a que el resultado no es, ni de lejos, el esperado, hay que reconocer que Michael Raven hace un buen trabajo como realizador, aunque de la sensación de ir apagándose conforme avanza el filme. Empieza de forma maestra con una secuencia en la que Stormy se está drogando en la cama junto a su amante, una escena que preconiza la vuelta del Raven más transgresor y sugestivo. Sin embargo, el resto del filme navega entre el melodrama y el suspense de una forma extraña en la que la narración se hace algo tediosa, se desaprovechan buenas oportunidades de traspasar ciertos límites y el conjunto queda algo descafeinado. Posiblemente, el principal error de la película es el método de narración, con una Stormy que acompaña al espectador en voice-over.

La primera escena sexual la protagoniza Stormy junto a Voodoo sin mucho a destacar. El asunto mejora con la escena de Diana Doll, Jay Huntington, Marcus London y Roxy DeVille, con mucha más acción y morbo. Impulsada por lo anteriormente visto, Stormy sueña que le hace una corta felación a Tony DeSergio y después comparte una desaprovechada fiesta sado con Roxy Deville. Deville vuelve a la carga poco después con Tony DeSergio en una escena mucho más satisfactoria que la anterior y más tarde, durante la cena, Gianna Lynn y Randy Spears tienen un duelo sexual amo/esclava. Para terminar, Stormy remata la parte sexual en una escena con Tony DeSergio. Aunque nada especialmente destacable, el cuarteto y la escena de Deville y DeSergio no están nada mal.

Así, "Bound" supone un entretenimiento muy irregular, del que se espera más de lo que se recibe. Stormy intenta afianzarse como intérprete, dando incluso más importancia a su capacidad actoral que a la sexual, pero un trabajo flojo en el guión no le permite lucirse o, al menos, empaña su labor.

Lo mejor: la escena en la que Stormy se droga

Lo peor: que aburre un poco

La imagen: Stormy colocada en la cama