Fallen (Brad Armstrong, 2008)

Brad Armstrong venía meses gestando una nueva gran producción para Wicked Pictures. Finalmente se ha cristalizado en "Fallen", un drama romántico sobre el sentimiento de culpabilidad, el dolor de la pérdida y el amor imposible. A la cabeza de este filme, Armstrong ha colocado a su mujer Jessica Drake, que desde hace un tiempo está intentando superarse película a película. Jessica viene acompañada con un elenco fabuloso que incluye, entre otros, a Brad Armstrong, Randy Spears, Angie Savage, Shyla Stylez, Lana Croft, Gianna Lynn, Jada Fire, Jenna Haze o Jennifer Dark.

Jessica Drake es un ángel de la guarda que falla en su misión y cuya protegida (Jenna Haze) muere en un accidente fortuito. A causa de este fallo en su responsabilidad, Jessica es expulsada del reino de los cielos, despojada de sus alas y abandonada a su suerte en la tierra, con el don de la inmoralidad, pero sin ninguna esperanza viva. Jessica se introduce en los bajos fondos de la ciudad y se da a la depravación y el vicio hasta que conoce a un hombre (Brad Armstrong), alguien dispuesto a amarla, pero que era el novio de la protegida de Drake. Tras grandes dudas, Jessica decide comenzar una relación con él e, incluso, contarle toda la verdad. Pero el destino elige siempre caminos insospechados.

No se debe tener ninguna duda acerca de la calidad técnica de la película. Muy bien rodada y fotografiada, Armstrong toma prestado el mejor estilo onírico y videoclipero de Michael Ninn y lo funde con su forma de hacer películas y de encajar el drama en el género X. El problema, realmente, está en el guión. La historia es buena, pero te pasas toda la película esperando que la trama se desarrolle más allá de la premisa inicial y, por desgracia, tienes que esperar hasta los diez últimos minutos para ver algo que, además, tampoco es especialmente revelador.

Es un filme bien hecho y entretenido, pero que no aporta lo bastante. Desde el principio, Wicked Pictures prometió más de lo que tenía. Bueno, mejor dicho, prometió lo equivocado. Se explotó mucho la faceta de gran producción, de profundidad en los personajes y de gran historia, cuando se tenía que haber sacado a la luz la parte sexual, que es espléndida, y mostrar que el envoltorio era realmente vistoso y dirigido a la visión en pareja.

El filme, que como he dicho es entretenido y cuenta una historia que, en un principio, merece la pena, peca de poca complejidad o, mejor dicho, de extrema sencillez. La sencillez es buena en un filme X cuando no se tienen pretensiones y se busca el tono light desde el principio. Pero aquí, Armstrong nos presenta un historia con muchas posibilidades a nivel de personajes y profundidad, y sólo nos cuenta una historia ya varias veces vista y que no avanza lo suficiente.

Sin embargo, sexualmente, Armstrong da un paso acertado y nos ofrece una colección de escenas cargadas de buen y potente sexo. Como he dicho, se trata de un filme con un público potencial femenino, pero eso sólo repercute en la historia: junto al drama romántico, aquí tenemos sexo morboso y duro. Mucho anal (Jessica, incluso, no ofrece su primer doble penetración), orgías, tríos, lésbicos, también escenas más románticas, mucho vicio y un reparto muy sensual.


Jessica toma parte en siete de las nueve escenas del filme. Tiene cuatro escenas de parejas: dos con Brad Armstrong, una con Randy Spears y una última, esta de sólo oral, con Herschel Savage. Jessica también protagoniza un sensual lésbico con Angie Savage, un trío con Shyla Stylez y Niko, y una oscura orgía con Lana Croft, Gianna Lynn y Jada Fire, entre otros. Las dos escenas restantes donde no participa Jessica, las protagonizan Jenna Haze y Brad Armstrong, por un lado, y Jennifer Dark, Marcus London y Tommy Gunn, por otro.

Es difícil decantarse por alguna de estas escenas ya que todas tienen un muy buen nivel y el reparto es espléndido. Sin duda, la lujuriosa y morbosa orgía es una escena memorable, donde tenemos la doble penetración de Drake, mucho anal y un trabajo fantástico de todos los participantes. Junto a esta escena, yo incluiría como las mejores el trío de Jessica, Shyla y Nico (muy carnal y apasionado) y la escena de Jennifer Dark, donde el morbo y el gozo llenan toda la pantalla. Asimismo, los momentos previos al lésbico de Jessica, con una Angie Savage totalmente turbadora y la primera escena de Brad y Jessica también son dignas de mención. Sea como sea, ninguna escena sexual, salvo quizá la segunda de Brad y Jessica, tiene desperdicio en es filme.

En el terreno interpretativo, todo podría haber ido mejor, pero el nivel no está nada mal. El problema es que sólo hay dos personajes (el de Drake y el de Armstrong) con verdadero peso y se echan en falta secundarios que enriquezcan a la pareja. Armstrong cumple bien con su papel, pero se nota que hubo mucho trabajo en la realización y puso en ello todo su esfuerzo, con lo que, aunque bueno, no es su mejor trabajo interpretativo. En cuanto a Drake... lo hace bien, pero a mí nunca me ha gustado mucho como actriz (aunque esto son gustos, Jessica cumple con lo requerido por el guión).

En conclusión, un filme que gustará al estereotipo de público femenino (y digo estereotipo porque hay muchas mujeres que quieren un porno más directo y no buscan las historias blanditas como se suele pensar) y entretendrá mucho al masculino, que se encontrará con una historia correcta, muy bien realizada y con un nivel sexual muy bueno. Jessica Drake avanza en su carrera protagonizando filmes estelares y superando sus límites en el terreno sexual y no estancándose en este campo como le está pasando a su compañera Stormy Daniels.

Lo mejor: El sexo y la dirección artística

Lo peor: que la historia tarda demasiado en ponerse interesante y no logra sorprender